TEMA 13 SISTEMA MUSCULAR

1. INTRODUCCIÓN. El conocimiento por parte del profesional del sistema músculo-esquelético debe redundar en una mejor aplicación de su trabajo. A lo largo de este tema vamos a realizar un repaso anatomo-fisiológico del sistema muscular, explicaremos las características particulares de los periodos evolutivo.

EL SISTEMA MUSCULAR. En el cuerpo humano existen tres tipos de músculos: LISO. Constituye la capa muscular de la mayor parte de las vísceras. ESTRIADO. Son los que forman toda la musculatura esquelética responsable de la producción de movimiento. CARDIACO. Es el músculo que constituye las paredes del corazón y que por sus peculiares características morfo-funcionales no se incluye en ninguno de los dos tipos anteriores, participando de alguna manera de las características de ambos.

EL SISTEMA MUSCULAR. El sistema muscular constituye junto al sistema nervioso una unidad funcional cuyo resultado es la contracción del músculo en respuesta a un estímulo eléctrico procedente del nervio. Todo ello gracias a un perfecto acoplamiento electromecánico (excitación y contracción) mediado por complejos mecanismos bioquímicos en los que el calcio juega un papel primordial. Por tanto, desde un punto de vista funcional sería más correcto hablar de Sistema Neuromuscular. El mejor exponente de ésta unidad funcional son las UNIDADES MOTORAS, formadas por una neurona motora unida a un número variable de fibras musculares.

3. ESTRUCTURA Y FUNCIONES.

3.1 CLASIFICACIÓN. Atendiendo a su morfología, el músculo estriado puede clasificarse en distintos tipos: fusiforme (en forma de huso) penniforme (en forma de pluma) semipenniforme segmentado biceps (dos cabezas) triceps (tres) cuádriceps (cuatro) Serrato Por otra parte, los músculos esqueléticos pueden ser monoarticulares, cuando se insertan en dos huesos vecinos y cruzan una sola articulación sobre la que actúan, o poliarticulares, cuando atraviesan dos o más articulaciones (por ejemplo el sartorio, recto anterior).

3.2 ESTRUCTURA El elemento anatómico característico en el músculo estriado es la FIBRA MUSCULAR. Esta célula muscular tiene la propiedad de hipertrofiarse de forma considerable bajo el estímulo de una función motora activa, lo que va a resultar decisivo en el entrenamiento. En la siguiente figura puede apreciarse la característica distribución del músculo en haces, fibras, miofibrillas y miofilamentos, que es la responsable de su aspecto estriado.

3.2 ESTRUCTURA El músculo está envuelto en una vaina de tejido conjuntivo llamada EPIMISIO o FASCIA, la cual penetra en su interior formando una especie de tabiques que separan entre sí a los fascículos musculares; es el PERIMISIO. Las fibras musculares quedan separadas entre sí por el ENDOMISIO. La función de estos envoltorios conectivos es fundamental: constituyen un componente elástico paralelo a la fibra, aseguran la cohesión estructural entre las fibras musculares y sirven de soporte a los vasos y nervios. Las miofibrillas son el elemento contráctil de la célula muscular y están formadas por miofilamentos que contienen dos tipos de proteínas contráctiles denominadas ACTINA y MIOSINA, cuya especial disposición y ultraestructura resulta decisiva en la contracción muscular, siendo su unidad estructural el SARCÓMERO.

3.3 MECANISMO DE CONTRACCIÓN MUSCULAR La contracción de la fibra muscular se inicia con la llegada del impulso nervioso y se explica por la disminución de la longitud de cada uno de los sarcómeros mediante el deslizamiento entre los filamentos gruesos y delgados. La unidad motora sigue la ley del “todo o nada”, es decir que cuando una neurona es estimulada, todas las fibras musculares que dependen de ella se contraen al máximo y al unísono o no se contraen en absoluto. Por tanto, la intensidad de una contracción muscular en su conjunto no depende de que el estímulo nervioso sea mayor o menor, sino del número de unidades motoras que se reclutan.

3.4 TIPOS DE FIBRAS

3.5 FUNCIONES Podemos hablar de diferentes FUNCIONES musculares: AGONISTA: El músculo agonista o motor primario es el responsable del movimiento principal que se está realizando. Así tenemos los músculos principales y los accesorios que actúan para ayudar a los primeros. ANTAGONISTA: Es aquel músculo que se inhibe para que el músculo agonista pueda realizar su acción. Su función principal es la de frenado y conducción del movimiento principal. Por ejemplo es la acción que realiza el tríceps cuando se contrae el bíceps braquial.

3.5 FUNCIONES Podemos hablar de diferentes FUNCIONES musculares: FIJADORA: Es el músculo que fija el hueso en el cual actúa el músculo principal. SINERGISTA: Cuando varios músculos cooperan para realizar una misma acción. Esta sinergia puede ser concurrente (cuando dos músculos tienen una acción común y otra antagonista, al contraerse simultáneamente eliminan la acción antagonista y aparece la acción común. Ej: Oblicuos del Abdomen) o verdadera (cuando un músculo se contrae para acumular una de las acciones de un músculo multiarticular que se contrae. Ej: flexión de muñeca, acompañada de dedos.

4. CARACTERÍSTICAS PARTICULARES DEL PERIODO EVOLUTIVO CORRESPONDIENTE A LA ETAPA. Hasta los 11-12 años se da un desarrollo paralelo en la fuerza de los chicos y las chicas. Es a partir de esta edad cuando empiezan a hacerse significativas las diferencias entre sexos por el aporte de andrógenos que tienen los chicos gracias a su desarrollo sexual. Cabe señalar que parece existir una correlación bastante directa entre la curva de concentración de testosterona y la curva de aumento de la fuerza. En estas edades las chicas tienen un desarrollo menos marcado y que finaliza sobre los 15-17 años. Los chicos tienen un desarrollo mucho más marcado y llega aproximadamente hasta los 18-20 años. La diferencia entre sexos se hace mucho mayor en el último estadío de la adolescencia.

4. CARACTERÍSTICAS PARTICULARES DEL PERIODO EVOLUTIVO CORRESPONDIENTE A LA ETAPA. Según Dimock, el máximo incremento de fuerza aparece 14 meses después del máximo crecimiento en longitud y 9 meses más tarde del máximo aumento de peso. En las mujeres esto se suele conseguir de 2 a 4 años antes que en los hombres. Entre los 25 y los 30 años se alcanzan los mayores niveles de fuerza, aunque las mujeres lo pueden conseguir varios años antes (3-4 años).

5. CONSIDERACIONES A TENER PRESENTE PARA TRABAJAR LA FUERZA. La base del trabajo debe fundamentarse principalmente en un tratamiento dinámico, asociado a contracciones anisométricas. La realización de actividades motrices de forma natural es la característica dominante.

5.1 ENTRENAMIENTO ESPECÍFICO Es interesante saber que la fuerza de los músculos de las piernas, especialmente antes de la pubertad, es muy similar entre los varones y las hembras. Tal vez, la explicación es que los varones y las hembras tienden a tener una cantidad similar de entrenamiento en los músculos de las piernas porque corren y caminan más o menos igual cantidad. Respecto a los músculos de los brazos y hombros, los varones generalmente tienen más entrenamiento para trepar, luchar, lanzar y otras actividades propias del género masculino. En los estudios sobre el desarrollo de la fuerza se suele discernir entre sus tres manifestaciones más populares: la fuerza máxima, la fuerza rápida o fuerza-velocidad y la resistencia de fuerza o fuerza-resistencia.

5.1 ENTRENAMIENTO ESPECÍFICO LA FUERZA RESISTENCIA en su carácter aeróbico se comienza a trabajar a la vez en ambos sexos, en torno a los 9-10 años, pero en su vertiente anaerobia láctica son las chicas las que pueden comenzar el entrenamiento con anterioridad (12-14 años) y para los chicos esto se retrasa hasta los 14-16 años, siempre incidiendo sobre las repeticiones.

5.1 ENTRENAMIENTO ESPECÍFICO LA FUERZA VELOCIDAD en las chicas se empieza a trabajar sobre los 10-12 años y en los chicos 2 años más tarde, siempre incidiendo en la velocidad.

5.1 ENTRENAMIENTO ESPECÍFICO LA FUERZA MÁXIMA puede comenzarse a entrenar en las chicas sobre los 12-14 años y en los chicos sobre los 14-16 años, insistiendo en la hipertrofia y coordinación intermuscular.

5.2 OTROS ASPECTOS En las primeras edades de ESO la posibilidad de desarrollo de fuerza es débil. Los chicos/as soportan mal las posiciones estáticas del cuerpo y la tensión muscular prolongada. La ganancia de fuerza máxima no debe ser un objetivo básico con los jóvenes. Una buena dosificación pude favorecer el crecimiento. Debe haber una formación polivalente y multilateral. Utilizar primero la autocarga que la sobrecarga. El trabajo con sobrecargas debe ser progresivo y de acuerdo con la condición física y edad biológica del sujeto.