Recuerda … EL DÍA 20 de Noviembre ES EL ANIVERSARIO DE LA DECLARACIÓN DE LOS DERECHOS DEL NIÑO …

…dicen los niños …

Cuando seamos grandes, no nos olvidemos que para las noches se hicieron los cuentos, y los reyes magos, y los duendes buenos; que sólo hace falta cuando llega el sueño tener bien a mano la voz de un abuelo. No nos olvidemos que en una vereda cabe un mundo entero, de risas y ruedas, que no hay mar tan nuestro como el de la acequia, que con dos pedales de una bicicleta lo que queda lejos siempre queda cerca. E l hambre avanza en los países ricos en agricultura porque se les obliga a importar alimentos, denuncian las ONG..

No nos olvidemos de las maravillas que guardan las cosas sencillas, los viejos cajones, la flor, la semilla. La vida es un viaje y es cuestión de vida sentarnos al lado de la ventanilla.

Cuando seamos grandes va a ser muy bonito tener como amigos a los animales y gritarles cosas y entender sus gritos, y explicar los vuelos por el infinito...(los grandes no entienden a los pajaritos)… dicen los niños. No nos olvidemos cuando seamos grandes que un beso es un modo de quedarse en alguien, que siempre hay horario para acariciarse, que el amor es todo, que ternura es madre, que hay que estar temprano cuando se hace tarde… dicen los niños. U na niña indigente duerme en un paso subterráneo para peatones en K anpur. I ndia.

Cuando seamos grandes no nos olvidemos de la fantasía, del sol y los juegos, los cumpleaños, y el circo viajero, los pasayos tristes, los muñecos buenos, la hermosa costumbre de decir: ¡TE QUIERO!... Infancia en Irak. U n niña miro pasar a unos soldados estadounidenses que patrullan en barrio de M uhalla en B agdad.

¿Quién es? Figaredo nació en Gijón en 1959, es miembro de la Compañía de Jesús y actual obispo de la localidad camboyana de Battambang, donde reside dirigiendo la diócesis en la región desde Se le conoce como el 'Obispo de las sillas de ruedas'. Recibió la Gran Cruz de la Orden Civil de la Solidaridad que le concedió el Gobierno español y Premio Juan María Bandrés de la Fundación Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) por su trayectoria humanitaria y por su trabajo con los mutilados por las minas antipersona, entre otras distinciones. Monseñor Kike Figaredo Su historia solidaria

Impulsado por su vocación de trabajar por la gente, se trasladó en 1985 a los campos de refugiados en la frontera entre Tailandia y Camboya. Fue entonces cuando decidió consagrar su vida a los mutilados por las minas antipersona. En 1990 fundó en Phonm Penh (Camboya) la 'Casa de la Paloma', un centro educativo donde además desarrolla talleres en los que los propios mutilados construyen sillas de ruedas siguiendo el modelo Mekong (silla con tres ruedas para adaptarse al terreno local). Fabrican artesanía popular, y reciben formación profesional como electricistas o talladores de madera. Para recaudar fondos y seguir impulsando su lucha contra el armamento antipersona, ha lanzado el libro 'Camboya', un recorrido en más de cien fotografías por la cara más bella del país asiático.

Agradecemos la copia y difusión de los contenidos de esta presentación. ANIVERSARIO DE LA DECLARACIÓN DE LOS DERECHOS DEL NIÑO