Navidad…...la ternura de una madre
Una nueva ocasión de hacer memoria, de ahondar en la fe, de vivir la experiencia de Emmanuel. Un nuevo 25 de Diciembre.
Como la estrella de Belén, la Navidad debe señalarnos el camino y nutrirnos de esperanza.
El Niño Jesús en el pesebre es “una señal pequeña y frágil, pero rica por la fuerza de Dios que se hizo hombre por amor”. JP II
Navidad es la ocasión de ver con los ojos de la fe esta luminosa realidad, de sentir con los latidos de la esperanza el ardor del fuego de la Vida y de dejarnos inundar por la ternura y el amor divinos.
No desperdiciemos la Noche Buena ni la Navidad, abramos nuestro corazón a la acción de la gracia, y comprometámonos con Jesús.