He aprendido…
Aprendí… que no puedo hacer que alguien me ame, lo que sí puedo es dejarme amar, el resto depende de ellos.
Aprendí… que sin importar cuanto me preocupe por alguien, algunas personas simplemente no se preocupan por mí.
Aprendí… que amar y querer no son sinónimos sino antónimos, el querer lo exige todo, el amar lo entrega todo.
Por todo esto, quieran sin temor, amen sin restricción, busquen sin desesperación.
Por una vez sean amados, valdrá la pena la oportunidad en que ustedes creen haber fallado, o piensen haber sido defraudados.
Prefieran mil veces, sentir el fuego del amor por un segundo, que la lejanía de la felicidad por la terquedad…
al temer ser herido o herir a alguien. Rosa.