Plaza de la Constitución Una iluminada visita a la Málaga nocturna Te espera su cálida noche

Plaza de la Constitución

Pasaje de Chinitas

Calle Larios

Calle Larios. Exposición de Baltasar Lobo

Carnaval. Calle Larios

Carnaval. Alameda Principal

Calle Marín García

Iglesia de San Juan

Calle Nueva

Plaza de las Flores

Torre de la Catedral Vista desde Moreno Monroy

Calle Granada

Plaza del Carbón

Plaza Uncibay

Plaza de la Merced

Calle Pozo del Rey

Alcazaba

Teatro romano y Alcazaba

Alcazaba

Alcazaba. Vista desde terraza Rectorado

Rectorado

Banco de España

Ayuntamiento

Paseo del Parque

Palacio de la Aduana

Abadía Santa Ana

Calle Marquesa de Moya

Museo Picasso y San Agustín

Calle San Agustín. Museo Picasso

Catedral. Vista calle Cister

Catedral. Vista desde Calle Cister

Catedral. Puerta de las Cadenas

Portada de El Sagrario

Torre de la Catedral

Catedral

Palacio episcopal

Catedral

Calle Bolsa

Calle D. Juan Diaz

El Pensador de Rodin Calle Larios

Málaga y el mar Háblame del mar marinero. Marinero, háblame del mar… Me llaga su aroma, se baña en mi falda y observo a lo lejos a su infinidad. Yo sé de su vida y de sus hazañas, puesto que las olas vienen susurrando, y con el susurro me van desvelando toda la verdad. Desde mi atalaya le acecho, entre las almenas me escondo para vislumbrar sus cambios de luz. Me lanza sus guiños jugando las aguas entre la salobre brisa y el plácido ritmo de su ondulación. Mis ojos se pierden sobre el horizonte y mi fantasía en un vuelo ignoto, busca otros lugares de imaginación. Él es mi compinche y en las noches blancas me lanza destellos de luna que doran mi falda y adornan mi cara hasta la núbil llegada del alba. Y yo, plateada, sueño con amores de otras dimensiones, amores de allende junto a lunas claras. Dame tú la nuevas que yo necesito, dime cosas lindas que vieras allá. Háblame del porte y de su tronío, de su feroz fuerza y su dulce calma, de su vida interna que lleva preñada entre sus entrañas miles de esperanzas. Pues yo, Malaka, desde que naciera vivo de su savia, miro por sus ojos, siento que da vida a todos mis hijos, mientras que sus olas, su brisa y su canto, me colman de gozo y se van mezclando entre las biznagas de suave perfume que impregna mis calles desde el mismo Palo hasta los Percheles, en la calle Larios, la Constitución, desde el Molinillo hasta la Estación. Háblame del mar marinero. Marinero, háblame del mar que sin él me muero. Antonio Porras (2009)

Homenaje a Málaga Diseño, realización, fotografía y arreglo musical: Antonio Porras Cabrera Música: Malagueña salerosa Nana Mouskouri Poema: Málaga y el mar (Antonio Porras)