La amante Eduardo M.
Un matrimonio estaba cenando en un exclusivísimo restaurante, cuando de pronto, una chica muy mona, elegante, de fino estilo y de cuerpo casi perfecto, entra..., se acerca a la mesa, le da al marido un beso que quita el aliento, diciéndole "nos vemos en otro momento...!!!", y a continuación se retira...
Su esposa lo mira con los ojos desorbitados y le dice: - ¿ Me puedes explicar quién es esa...???. - Es mi amante - responde el hombre tranquilamente. - Ah no! ¡ Esto es la gota que desbordó el vaso ! - explota ella – ¡Quiero el divorcio!
Voy a contratar al abogado más maldito y de peor fama que exista... ¡Y no voy a parar hasta encontrar la forma de hacerte la vida totalmente miserable...!
- Francamente, te entiendo – responde sosegada y tranquilamente el esposo - pero debes tener en cuenta que si nos divorciamos, no habrá más viajes a Europa, especialmente a esquiar, se acabaron los cruceros por el Caribe y el buceo también, ni hablar de los BMW y Mercedes en el garaje siempre disponibles, y..., no más restaurantes exclusivos.
Por favor anda meditando la venta de la mansión de 26 habitaciones que poseemos, para comprar dos casas más chicas, pero..., obviamente, la decisión es tuya.
En ese mismo momento como interfiriendo en la conversación, entra al restaurante un amigo de la pareja acompañado por una despampanante y enloquecedora morocha.
- ¿ Quién es esa que está con Alfredo ? - inquiere la mujer – - Es la amante - responde imperturbable el esposo -
Y ella distraídamente menea su cabeza y agrega:
- Ah..., pero la nuestra es mucho más linda....!!!