LA COMPETICIÓN DE LAS RANAS
La prueba consistía en llegar a lo más alto de una gran torre. Hace muchos años, en el lejano país de las ranas, se organizó una interesante competición. La prueba consistía en llegar a lo más alto de una gran torre.
A una señal del juez de la prueba, comenzó la competición... Había en el lugar una gran cantidad de gente que, curiosos, no querían perderse el acontecimiento. A una señal del juez de la prueba, comenzó la competición...
Por eso comenzaron a decir: Nadie creía que las ranas pudieran alcanzar la cima de aquella torre... Por eso comenzaron a decir: ¡Qué pena, no lo van a conseguir, no lo van a conseguir...!
Algunas ranas comenzaron a abandonar la carrera. Pero había una que persistía y continuaba sin hacer caso de las voces...
Poco a poco muchas ranas se fueron dando por vencidas... Excepto aquella ranita que seguía tranquila, cada vez con más fuerza.
Casi al final de la competición, todas desistieron... ...menos esa ranita que, curiosamente, en contra de todos y de las voces de los curiosos...
quiso y pudo llegar a la cima con un gran esfuerzo. Las demás quisieron saber cómo lo había hecho. Una se acercó a preguntarle cómo había conseguido concluir la competición.
Y así pudo descubrir que aquella ranita... ...¡era SORDA!
Recuerda el poder que tienen las palabras que escuchas... ¡No permitas que los pesimistas y negativos derrumben las mejores y más profundas esperanzas de tu corazón! Recuerda el poder que tienen las palabras que escuchas...
¡Por lo tanto, preocúpate de buscar siempre el lado positivo de las cosas! Y sé siempre sordo cuando alguien te diga que no eres capaz de realizar tus sueños.
¡Buena Suerte!