SABES
Sabes, yo siempre fui soñadora, soñé la luna, y la luna tuve soñaba, pero no lo demostraba siempre en mi corazón quedaba.
Un día me dio por escribir mis sueños mis ilusiones mis esperanzas y mis deseos unos se cumplieron, otros siguen esperando pero yo, sigo soñando.
Sabes, yo cada mañana saludo al nuevo día aunque luego me entre la melancolía, por que al cabo del día, recobro mi alegría, y vivo, con mis sueños, como cada día.
Hay que soñar, imaginar, desear, querer, y aunque a veces no se cumplan los deseos hay que dibujar una sonrisa en tu cara, aunque por la noche a solas en tu habitación….. vuelvas a llorar.
Sabes, yo siempre fui soñadora y aún hoy, sigo soñando.
UN POEMA DEL LIBRO DE MEMEN