Ahora que lo importante es tener, y ser poderoso, no importando como o sobre quienes.
Ahora que hay guerra, la cual es un fracaso para la humanidad pues nos destruye a todos.
Mientras se derrama sangre por petróleo, mientras que en nombre de Dios se hacen barbaridades.
Mientras muchos se quedan sin nada y pocos con mucho, mientras el temor y el miedo se apoderan de las personas.
Mientras los poderosos se hacen sordos ante la vos del mundo y muchos con nuestra indiferencia ante el dolor ajenos cómplices somos.
Muchos niños e inocentes mueren a diario acusados de terroristas y mientras otros pierden la ilusión para vivir, ante el dolor y la desesperación.
Ante todo esto no podemos ser indiferentes, ni estar callados, no podemos ser simples espectadores
Es el momento de demostrar en lo que creemos: El Dios de la vida, dador de esperanza que nos invita a ser discípulos
A ser testigos y demostrar con nuestra vida que es posible un mundo mejor, donde la única ley sea el amor.
En este momento de crisis mundial pidamos al Dios de la vida porque termine la tormenta y vuelva la calma
Y que nuestras vidas se dejen guiar por la verdadera luz que es Jesucristo.
Que la juventud demuestre su capacidad transformadora ahora más que nunca.
Siendo verdaderos profetas que anuncie y denuncie con su propia vida,
Siendo centinelas del nuevo milenio, Constructores de la Civilización del Amor.
Constructores del mundo que todos queremos
Con Justicia, Paz, Amor y Fraternidad