Elizabeth Taylor: "Amé a Michael con toda mi alma, no me imagino mi vida sin él“ La actriz recibió la noticia de la muerte de Michael mientras se preparaba para volver a Londres. En su momento estaba tan devastada que no pudo hacer declaraciones. Habló para un periódico, y aseguró que amaría siempre al 'rey del pop', apelativo que ella misma le puso en 1989.

LAS ENFERMEDADES DE LIZ Episodios de neumonía, de los cuales uno, en 1961, requirió una traqueotomía, y otro, en 1990, por el que tuvo que ser ingresada de gravedad. Además de esto, Elizabeth se sometió a dos operaciones de cadera e incluso, tuvo un tumor benigno en el cerebro que le fue extirpado en En octubre de 2009, fue operada con éxito de un problema en una válvula cardiaca y en los dos últimos años ha sido ingresada en varias ocasiones para serle realizadas revisiones periódicas.

Su Muerte Después de varios meses hospitalizada por problemas cardiovasculares, la deslumbrante actriz estadounidense de los ojos violetas falleció a la edad de 79 años en el hospital Cedars- Sinai de Los Ángeles. Taylor murió apaciblemente rodeada de sus seres queridos, entre ellos sus hijos Michael Wilding, Christopher Wilding, Liza Todd y Maria Burton. Si algo ha caracterizado a esta actriz, aparte de su brillante trayectoria cinematográfica y sus ocho matrimonios, es la entereza con la que se ha enfrentado a las continuas enfermedades que se le manifestaron durante toda su vida.

Su Funeral Elizabeth Taylor fue enterrada en la más estricta intimidad en el cementerio Forest Lawn Memorial Park en Glendale, cerca de Los Ángeles. Las exequias de Taylor, que se convirtió al judaísmo antes de contraer matrimonio con Eddie Fisher en 1959, fueron celebradas por el rabino Jerry Cutler, al que la actriz conoció a través del actor Jon Voight, padre de Angelina Jolie. Cinco limosinas negras trasladaron a los familiares y amigos íntimos de Elizabeth al lugar del servicio funerario, pero no hubo cortejo fúnebre. Tal y como ella dejó escrito antes de morir, el entierro se celebró con quince minutos de retraso para cumplir su último deseo. Según leyó su representante “Ella quiso llegar tarde incluso a su propio entierro”.

“No había pasado ni una semana desde la muerte de la actriz y los problemas por su herencia comenzaron. Los cuatro hijos comenzaron a cobrar demasiada importancia en el seno de su familia y no es precisamente por la falta de generosidad de Elizabeth a la hora de repartir su fortuna. El patrimonio de Taylor fue valorado entre 600 y millones de dólares. El último deseo de la actriz fue que su colección de joyas, que se estimaba en 150 millones de dólares fuera subastadas. Los dineros fueron destinados íntegramente a la caridad y a la Fundación que ella misma creó: Elizabeth Taylor AIDS Foundation. Por desgracia las disputas familiares no fueron por desacuerdos con la herencia sino por los derechos de la estrella. ¿Quién seria el beneficiario del dinero que genera la actriz después de su muerte? Partiendo por los perfumes. Su marca White Diamonds sigue siendo una de las de mayor venta y recauda unos 69 millones de dólares en tiendas al detalle del mundo.

LA SUBASTA Todas estas joyas que les he mostrado, y las que completan la colección formada por 269 piezas, se subastaron en la sede que Christie’s tiene Nueva York, concretamente en el Rockefeller Center. Los diez días anteriores a las subasta, se exhibieron todas las joyas para el deleite de los afortunados que tuvieron la oportunidad de acercarse a ese lugar. Una parte de la recaudación de la subasta sería destinada a ‘The Elizabeth Taylor AIDS Foundation’ (ETAF), organización que la actriz fundó en 1991 para luchar contra el cáncer. Sus amadas joyas adornarán el cuerpo de otras afortunadas, aunque será muy complicado lucirlas como ella lo hacía.

La maratónica subastas de joyas, vestidos y pertenencias de la fallecida actriz estadounidense Elizabeth Taylor. Alcanzó ventas por la impactante cifra de más de 150 millones de dólares.

Un remate online vendió objetos por cerca de 6 millones, según cifras de Christies. Un total de 38 obras de arte, que pertenecieron a la fallecida actriz Elizabeth Taylor, entre ellas valiosos Van Gogh y Degas