Si amas algo, déjalo libre. Si regresa, será tuyo para siempre. Si no regresa, es porque, en realidad, nunca fue tuyo. Pero si se sienta en tu sala, revuelve tus cosas, se come tu comida, usa tu teléfono y parece no darse cuenta de que tú lo liberaste... ¡Es porque te casaste con él o lo pariste!
Estadística para festejar: Cada siete minutos, en un gimnasio, alguien se acalambra, o pierde sus calzones, o se aplasta un pie con una pesa...
Insisten en que debemos matener la comunicación con nuestro cuerpo... El mío es poco comunicativo, pero ayer me animé y le dije: “Cuerpo, ¿qué tal si hoy a las seis vamos a hacer ejercicios de tonificación muscular?” Con sonido claro como una campana, mi cuerpo me contestó: “Si lo haces, gordita, ¡eres mujer muerta....”
Mi mente no sólo vaga, a veces se va y no sabe volver. La mejor forma de olvidar todos tus dolores es caminar con zapatos que te queden chicos Lo bueno de vivir en un pueblo chico es que, cuando no sabes qué estás haciendo... los vecinos lo saben.
¡Asombroso!... Cualquier prenda que cuelgues en tu ropero durante algunos meses, encoge tres talles. ¡Justo cuando me estaba acostumbrando al ayer, aparece el hoy!!
A veces pienso que lo he comprendido todo... pero enseguida vuelvo a la realidad.
¿No es grandioso ser mujer? Ayuda a otras a vivir más: comparte la risa con otras mujeres y recuérdales que es saludable burlarse de los pequeños inconvenientes que tiene la vida. ¡COMPARTE LAS SONRISAS!