LA POLÍTICA DE LA FE Y LA POLÍTICA DEL ESCEPTISISMO: Oakeshott LA POLÍTICA La Política Moderna, es un tema difícil de abordar ya que se sitúa su discusión.

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1 LA POLÍTICA DE LA FE Y LA POLÍTICA DEL ESCEPTISISMO: Oakeshott LA POLÍTICA La Política Moderna, es un tema difícil de abordar ya que se sitúa su discusión más en el futuro que en su comprensión del pasado. En la actualidad, los gobernantes, se esfuerzan un poco más de lo que lo hacían sus antecesores y, también, los gobernados han aprendido a saber que sí y que no pueden esperar de su gobierno. La pregunta medular es ¿Cómo hemos aprendido a llegar a razonar esto? La política no debe tratar de comprenderse como meros actos naturales sino como acciones humanas que buscan ser interpretadas. Para comprender a la Política, hay primero que comprender las motivaciones (intenciones) del gobernante. ¿Qué es lo propio de la Función Gubernamental? Las acciones vistas en el contexto de la actividad (cargo y persona). Una forma de comprender la Política es, por medio, del análisis de LA PRÁCTICA (actividad política), EL DISCURSO (la intención) y LOS ESCRITOS (difícil de comprender). La actividad del gobierno en Europa no es simple, sino que ha sido nutrida por la leche de muchas otras culturas y formas de gobierno. Por su conformación política, el viejo continente, es poseedor de una gran variedad de sociedades hibridas (compuestos históricos) que, hacen más complejo, su estudio. Por lo anterior, es muy complejo poder estudiar linealmente el caso europeo. De la misma forma ocurre con el lenguaje político, es difícil comprenderlo ya que es una amalgama de tiempos, pensamientos e intenciones. Una de las complejidades más notable en cuanto al vocabulario político son las palabras “Paz” y “Guerra”. De igual manera sucedió con el termino “Fascista” y “Democracia”. La Política de la Fe no es más que un sistema de gobierno esté al pendiente de las necesidades de la humanidad, es más, busca su perfección. En este pensamiento, el gobierno, viene a fungir como el instrumento del perfeccionamiento de la población. Pero para poder llegar a la perfección, hay que decidir en qué dirección se encuentra lo correcto. La Política del Escepticismo, el gobierno tiene una actividad especifica que nada tiene que ver con la búsqueda de la perfección (una ilusión). Para un escéptico, el primer deber de un gobierno es mantener el orden. El segundo es buscar el progreso, es decir, el mejoramiento de: *El sistema de derechos *El sistema de obligaciones *El sistema de medios de reparación En la Política de la Fe, las decisiones ciudadanas no son libres sino que deben ser autorizadas por la suprema autoridad (como sucedía en las comunidades primitivas). En la actualidad, este tipo de política, ha explotado dos formas de lenguaje: *Versión religiosa (imposición del poder hacia el súbdito). *Versión Económica (la integración de las actividades para llegar a un punto de bienestar). La Política del Escepticismo, puede parecer muy moderna, sin embargo, en la realidad es una forma de gobierno con poco impacto entre sus habitantes. Usualmente sus gobernados desconfían de sus intenciones y, por su parte, el gobierno está más interesado en subsanar cualquier tipo de conflicto social que pueda poner en peligro su mandato. Al político hay que tratar de comprender en global y no en individual, es decir, dentro de su contexto social