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TEMA 17 Arte almohade. Arte nazarí: La Alhambra. El Generalife.

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1 TEMA 17 Arte almohade. Arte nazarí: La Alhambra. El Generalife

2 INTRODUCCIÓN HISTÓRICA: LOS ALMOHADES
Los almohades surgieron en Marruecos en el siglo XII, cuando los habitantes del Magreb se percataron de que los almorávides habían fracasado en su intento de revigorizar los estados musulmanes de la Península Ibérica y tampoco habían ayudado a detener el avance de los estados cristianos en la reconquista de España. El nombre castellano deriva de al-Muwahhid, que significa «el unificador», denominación que alude al fundamentalismo del movimiento . Ibn Tumart, fundador del movimiento, se autoproclamó mahdi («profeta del Islam») y llamó a todos los musulmanes, especialmente a los de la Península Ibérica, a retornar a las fuentes primeras de su fe; es decir, el Corán. Siguiendo estos principios, trataron de unificar las taifas y formar un activo gobierno islámico que pudiese hacer frente a los cristianos. En poco más de 30 años los Almohades lograron forjar un poderoso imperio que se extendí desde Santarémen la actual Portugal hasta Trípoli la actual Libia incluyendo todo el norte de África y la mitad sur de la península ibérica, y consiguieron parar el avance cristiano cuando derrotaron a las tropas castellanas en 1195 en la batalla de Alarcos y consiguieron también derrtar a las fuerzas del rebelde banu ganiya en Ifriqiya A pesar de los esfuerzos de los gobernantes, la dinastía almohade tuvo problemas desde un principio para mantener pacificada a la turbulenta Granada y, por otro lado, algunas de sus posturas más radicales fueron mal recibidas por la población musulmana de España. La victoria cristiana en la batalla de Las Navas de Tolosa (1212) marca el comienzo del fin de la dinastía almohade.

3 En el terreno decorativo aplicaron un repertorio caracterizado por la sobriedad, el orden y el racionalismo. Ello se tradujo en la aparición de motivos amplios que dejan espacios libres en los que triunfan el entrelazo geométrico, las formas vegetales lisas y el rasgo ornamental más novedoso, la sebqa. Esta composición que decora la Giralda, consiste en una doble trama romboidal en dos planos compuesta por arcos decorativos superpuestos a partir de la clave de los inferiores. Otra decoración arquitectónica que aparece en este mismo alminar y en la Qutubiyya es la cerámica, en la que se aplica la técnica del alicatado; es decir, piezas recortadas que, combinadas entre sí, componen un motivo decorativo. En otras ocasiones, estas manifestaciones aúnan el carácter ornamental como el funcional. Es el caso de la madera con la que se realizaron techumbres de par y nudillo con tirantes cuyo ejemplar más antiguo cubre la nave axial de la Qutubiyya de Marrakech. Estas armaduras estaban llamadas a adquirir un gran protagonismo en el arte mudéjar.

4 Las invasiones africanas de los siglo XI y XII (almorávide y almohade) traen consigo una arquitectura y arte musulmán basados en el sillarejo o mampostería entre hiladas de ladrillo, arco polilobulado o de herradura apuntada, bóvedas de mocárabes, y artesonados de lazo y armaduras de par y nudillo.

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6 La emblemática Giralda de Sevilla es el alminar de la mezquita mayor de Sevilla, la obra almohade de mayor enjundia de Al-Andalus. Fue iniciado en 1184 tras su encargo a Ben Baso y la terminó Alí de Gamara en 1198. Este importante edificio musulmán fue destruido para construir la catedral cristiana de estilo gótico, respetando únicamente dos elementos musulmanes: la citada giralda, reconvertida en campanario cristiano y el Patio de los Naranjos. El último cuerpo de la giralda fue sustituido en el siglo XVI por Hernán Ruiz mediante un remate renacentista sobre el que gira el "giraldillo" que da nombre a tan afamada torre. La decoración exterior se basa en ajimeces bien con arcos de herradura semicirculares o polilobulados rodeados por alfiz y acogidos por otro gran arco lobulado apuntado. En las calles laterales hay arcos murales y se extienden paños de "sebka" o red de una especie de rombos entrecruzados de formas redondeadas. No sólo la gran altura de este alminar hace destacar a la Giralda entre todas las norteafricanas, sino su decoración en franjas o calles verticales le confiere una airosidad especial. El esfuerzo de ascender por el interior de esta torre hasta el cuerpo de campanas da oportunidad de poder observar a poca distancia los magníficos trabajos de sus ventanales, además de aprovechar a presenciar la complicada estructura exterior de la catedral gótica sevillana.

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10 Comparación entre la Giralda de Sevilla y la torre Kutubiyya de Marrakech.

11 La Giralda es el monumento más emblemático de Sevilla
La Giralda es el monumento más emblemático de Sevilla. Este minarete de estilo Almohade fue construido por los Moros entre 1184 y 1198 hasta una altura de 76 metros. En 1586, después de la reconquista los cristianos añadieron el campanario. Emblema de Sevilla, la Giralda ofrece al visitante una silueta elegante y altiva. Construido en el siglo XII, el minarete (96 m) de la antigua mezquita estaba coronado por tres bolas doradas que desaparecieron en el siglo XIV debido a un terremoto. En el siglo XVI el arquitecto cordobés Hernán Ruiz le confirió su aspecto actual cubriéndola con un cuerpo de campanas, tres templetes superpuestos y balcones. Entonces se coronó el conjunto con una enorme estatua que simboliza la Fe y que cumple la misión de veleta (giralda), que dio nombre a la torre, mientras que la estatua recibió el apodo de Giraldillo.

12 La decoración austera y delicada traduce los principios del movimiento religioso almohade, riguroso, austero y contrario a todo lujo, que fue origen de una corriente artística que combina belleza y sencillez. Parece claro que la torre de la Kutubiyya de Marrakech, construida poco antes, le sirvió de modelo. Cada una de las cuatro caras está dividida en tres secciones verticales con ornamentación de ladrillo de tipo sebka (repetición de pequeños arcos polilobulados que forman una red de rombos).

13 Desde la Giralda, que se denomina así desde el siglo XVI, tras ser coronada por la veleta del mismo nombre, conocida también por el Giraldillo, entonaba los rezos el muecín o almuédano, y es posible que fuera también utilizada como observatorio astrológico. Curiosamente, la Giralda no posee escaleras, sino 35 rampas, con lo que se pretendía facilitar el acceso a caballo del primer anciano muecín.

14 Corona la torre la famosa veleta conocida como Giraldillo, que representa a la Fe
Encima hay todavía más cuerpos de arquitectura renacentista que se llaman cuerpo de carambolas, cuerpo de estrellas, cúpula y cupulín y sobre éste la gigantesca estatua de la Fé en figura de mujer con vestidura clásica romana que lleva en una mano un escudo y en la otra una palma. La figura fue, según algunos autores, diseñada por Luis de Vargas, modelada por Juan Bautista Vázquez el Viejo, y fundida en bronce por Bartolomé Morel, quedando instalada en Como la figura es giratoria se le dio el nombre de Giralda, tanto a la veleta femenina como a la propia torre.

15 Patio Naranjos (Catedral Sevilla)
El Patio de los Naranjos es lo que queda la desaparecida mezquita mayor almohade de Sevilla de Ben Basso, como "shan" o antesala para las abluciones de los musulmanes sevillanos antes de entrar en la mezquita. Aunque con muchas reformas, se advierte su estructura de patio conformado por pilares que sostienen grandes arcos túmidos. La puerta principal es la del Perdón y también es almohade. En el centro hay una fuente que pudo ser una pila visigoda o un baño de las termas romanas.

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18 La torre del oro Planta dodecagonal

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20 La Torre del Oro de Sevilla, es una torre militar albarrana (es decir, separada del resto de la muralla) que debe su nombre a su primitivo recubrimiento de azulejos con reflejos dorados. Construida en el primer tercio del siglo XIII por orden del gobernador Abù l-Ulà, su nombre es una traducción del árabe bury al-dahab, tiene doce lados, y desde su basamento de sillería se echaba una fuerte cadena que cruzaba hasta la otra orilla del río uniéndose a otra torre que existía en ese lugar, la Torre de la Fortaleza (una torre de menor importancia) y así protegiendo la entrada del puerto. Esta fue la defensa que hubo de romper la escuadra castellana mandada por Ramón de Bonifaz antes del asalto de Fernando III, en El último cuerpo circular de la torre fue añadido por Sebastián Van der Borcht en 1760. La torre sirvió, además de prisión en la edad media, y de recinto seguro para guardar, a veces, los metales preciosos traídos periódicamente por la flota de Indias. Actualmente es Museo Naval. Contiene grabados, cartas marinas, maquetas, instrumentos antiguos de marear (navegar) así como documentos históricos. Traza una imagen de la historia naval de Sevilla, de la importancia de su río y de la huella de marinos ilustres.

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23 ARTE NAZARÍ La severa derrota almohade en las Navas de Tolosa (1212), resquebrajo el poder musulmán dividiéndolo en nuevos reinos taifas. A partir de 1238 el reino de los Nazaríes de Granada fue el mas rico y poderoso. En los edificios nazaríes destaca la sobriedad de los exteriores mientras una profusa decoración ornamenta los interiores. Se emplean materiales pobres, la mampostería y el tapial; el arco de herradura es sustituido por un arco peraltado de silueta acampanada, las formas mixtilíneas revelan la función puramente ornamental de los arcos granadinos; las columnas presentan fuste cilíndrico; los capiteles corintios son sustituidos por modelos llenos de originalidad, con dos cuerpos, uno cilíndrico con decoración de cintas y otro sobrepuesto, de forma cúbica y frecuente incorporación de mocárabes; la cerámica de tipo alicatado recubre las partes bajas o zócalos de las estancias, siendo mas tarde utilizado generosamente el azulejo; el empleo de bóvedas de mocárabes resulta de un intenso efecto decorativo.

24 LA ALHAMBRA

25 La arquitectura nazarí constituye el final de una época de esplendor que comenzó en la Córdoba de los Omeyas en el siglo VIII. Esta arquitectura no se vería muy influenciada por los arquitectos que desarrollaron la mezquita cordobesa, muy anterior a la Alhambra, aunque sí presenta algunos de los elementos típicos de la arquitectura andalusí, como el arco de herradura con alfiz (marco amplio cuadrado en el que se envuelve al arco), las albanegras (enjuta de arco de forma triangular), además de elementos propios como el capitel de las columnas de la Alhambra. La mayor preocupación de los arquitectos de la Alhambra era cubrir decorativamente cada espacio, por pequeño que fuese. Cualquier elemento decorativo resultaba escaso. La mayoría de los arcos interiores son falsos, no sustentan ninguna estructura, simplemente decoran, las paredes están recubiertas de cerámica o yeserías, hermosísimas y muy ricas, las cubiertas presentan armazones de madera labrados de manera exquisita, etc. A pesar de tener prohibido el arte musulmán la representación de figuras, los temas de decoración en la Alhambra son muy variados. Se utiliza la clásica decoración caligráfica, en concreto escritura cursiva y cúfica, en la que se pueden leer, además de las palabras de Zawi ben Zirí (fundador de la dinastía nazarí): «sólo Dios es vencedor», poemas de distintos poetas de la corte. El elemento decorativo más utilizado por los arquitectos granadinos será el ataurique, o decoración vegetal, y, en menor medida, la lacería y las redes de rombos. Pared del Cuarto Dorado En la Alhambra se emplea un tipo de columna propio que no aparece en ninguna otra construcción. Es una columna de fuste cilíndrico muy fino, con una base que presenta una gran moldura cóncava, y adornada por anillos en su parte superior. El capitel, dividido en dos cuerpos, presenta en el primero, en forma de cilindro, una decoración muy sencilla y sobre él un prisma con los ángulos de la base redondeados, decorado de ataurique. Uno de los elementos decorativos más impresionantes utilizados en la Alhambra es la bóveda de mocárabe, que está compuesta por celdillas o alveólos superpuestos, destacando por su utilización la Sala de los Abencerrajes y la Sala de las Dos Hermanas.

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27 La Alhambra es una ciudad palatina fortificada, capital de Estado de al- Andalus, residencia de la corte de los sultanes nazaríes, emplazada en la parte mas elevada de una colina llamada sabīka, que se alza en la margen izquierda del río Darro, frente a la alcazaba qadīma del Albaicin, de época zīrí, en la ciudad de Granada. El nombre Alhambra viene de su nombre original que era al- hamrā (debido al color rojizo que poseía en su exterior, por la erosión y el color del hierro de la arcilla, aunque se sabe que estaba por entero revestido de estuco blanco) y también recibe el nombre de qal‘at al- hamrā’, porque estaba emplazado en su lugar un castillo rojo. El acceso al interior del recinto, se efectuaba por varias puertas. Dos de ellas(la de la Justicia y La de los 7 Suelos) se abren en el frente meridional. Fueron edificadas por Yūsuf I ( ) y poseyeron mayor valor monumental y de aparato que propiamente militar. En los últimos momentos del estado granadino, fueron reforzadas con baluartes para protegerlas de eventuales agresiones artilleras. Serian los primeros y últimos monumentos de fortificación abaluartada edificados en al- Andalus. En el flanco septentrional se abrían otras dos entradas: la Puerta de las Armas, que ponía en comunicación a la Alhambra con el interior de la ciudad y, otra, La Puerta de los Picos o del Arrabal, que permitía la comunicación con la zona del Generalife. El área interior estaba vertebrada por 3 calles: la Real Baja, la Real Alta y la de Ronda. La primera servia de acceso principal al espacio palacial y ayudaba a aislarlo de la zona de la acrópolis. La calle Real Alta, la más importante de todas, ordenaba con su trazado los edificios alhambrinos: residencia de altos funcionarios- palacios oficiales y construcciones publicas- zonas de servicio. La calle de Ronda constituía una autentica vía de circunvalación, con un uso predominante militar. En algunos puntos salvaba la presencia de ciertas construcciones por medio de pasadizos soterrados. Se compone de 23 torres alcmenadas y cuatro puertas de entrada al recinto.

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29 Es de destacar, a este respecto, la coexistencia dentro del recinto de dos tipos de torres: la militar, dispuestas a lo largo de toda la muralla y comunicados entre si por el camino de Ronda, y las torres- vivienda: torre de la Cautiva y torre de las Infantas. Son de mayor tamaño que las primeras y albergan en su interior una casa. El camino de Ronda pasa por debajo de las habitaciones privadas permitiendo el normal desarrollo de las tareas de vigilancia sin interferir en la intimidad de sus moradores. Entre los conjuntos palaciales independientes, el mas antiguo de todos fue El Partal, apoyado sobre la propia muralla de la ciudadela. Con bastante seguridad fue levantado por Muhammad III y completado por Yūsuf I. Es el palacio más antiguo de la Alhambra, residencia llamada qubba. Esta formado por un pabellón cubierto por una cúpula, y una torre anexa “ de las Damas” con una amplia alberca delante. Es un palacio de recreo Partal quiere decir portal, en árabe. Su pórtico de entrada esta precedido por un sereno estanque y formado por 5 amplios arcos, siendo el central mas alto y ancho que el resto. En origen los soportes de los arcos serian pilastras, pero en la restauración de 1965 los sustituyeron por finas colunmitas nazaríes. Se cubre el techo con un alfarje (techumbre plana de madera labrada y ornamentada) plano y agujereado, con un cupulin central. Al interior destaca una estancia central de planta cuadrada, con los zócalos de alicatado, yeserias encima y cubiertas con armadura de madera. En la parte occidental se eleva una torre observatorio

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31 El Palacio de Comares fue la residencia principal y oficial de sultanes nazaríes. Lo centraliza el patio de los Arrayanes, cuyo eje mayor conduce directamente al Salón de Comares, habitado dentro de la gran torre de Comares y precedido de la Sala de la Barca, más ancha que profunda. Servia el ambiente como Salón del trono o para grandes recepciones de Estado. El pavimento era de azulejos decorados en azul y dorado; en el centro de algunos, figuraba el escudo con el mote heráldico de la dinastía wa lā gālib ilā’ Allāh ta‘ (y no hay vencedor sino Dios, alabado sea). El techo esta formado por una armadura de madera policromada, dando lugar a complicadas combinaciones geométricas basándose en nudos. Allí se representan de forma esquemática los 7 cielos del universo musulmán y el trono de Dios, tal y como lo refiere una de las suras del Corán(67,3). En torno al patio y en los pisos altos de la torre y de as galerías circundantes se dispone toda una serie de habitaciones para uso privado. Junto al lado oriental del patio de los Arrayanes, a escala inferior, hay un baño edificado por Yūsuf I. Todas sus habitaciones están pavimentadas con mármol y sus zócalos son de azulejo. La mayoría se cubren con bóvedas esquifadas y una sola la tiene octogonal. Todas están perforadas por claraboyas estrelladas, en origen cerradas con cristales de colores para iluminar el interior. En planta lo componen una sala central cuadrada y varios corredores en torno a ella. En sus lados oriental y occidental, separadas por pares de arcos geminados, se disponen 2 profundas alcobas totalmente recubiertas de azulejos. El acceso a este palacio se realiza mediante un pequeño patio, con una fuente de mármol en el centro. Su lado meridional lo compone una fachada decoradísima, la Fachada de Comares, con un alero de madera labrada. Se abren en ella dos puertas adinteladas, una lleva al gran patio central del palacio. Sobre ellas dejando una amplia franja decorada en medio, campean tres ventanas, dos geminadas sobre los huecos de las puertas y otra simple en el centro. Esta hermosa fachada fue inaugurada por Muhammad V el 4 de octubre de 1370, en conmemoración ala toma de Algeciras. En este patio sentados bajo el alero y ante este autentico tapiz de yeso, los sultanes nazaríes, daban audiencia publica.

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33 El tercer conjunto, él más famoso de cuantos integran el monumento granadino: el Palacio de los Leones. Lo centra el patio de ese nombre, porticado y de crucero, con dos andenes que se cruzan en ángulo recto. En el centro se sitúa una fuente de piedra con una pila dodecagonal, epigrafiada en el borde y soportada por 12 leones. Este espacio central esta flanqueado en cada lado por estancias dispuestas axialmente. Dos de ellas (sala de los Reyes y la sala de los Mocárabes) a oriente y occidente respectivamente, forman espacios alargados y estrechos en los lados menores: divididos en pequeñas alcobas en la Sala de los Reyes. En el centro de los costados más largos se emplazan otros dos espacios: uno más pequeño, de planta tripartita, la Sala de los Abencerrajes, y otro mas complejo, compuesto por varias estancias en torno a un salón central, Sala de las dos hermanas. La arquitectura del Palacio de los leones, residencia privada de los monarcas, sobresale por su calidad y delicadeza. El pórtico que lo circunscribe descansa sobre columnas de mármol blanco con fustes cilíndricos adornados con anillos. Los capiteles son también cilíndricos (inferior) y cúbicos (superior) recubierta esta por vegetación muy estilizada. A mediodía del Patio de los Leones se levanto la Rauda o panteón Real de la dinastía, del que las excavaciones dejaron la planta (rectangular y como las mezquitas, orientada a La Meca; sudeste- noroeste. La cabecera quedaba dividida en res capillitas, seguramente destinadas a enterramientos reales. La cepa de 4 pilares dispuestos en cuadro, en el centro de la habitación. Hace suponer que había una linterna para iluminar el interior. Originalmente debía estar rodeada de jardines, de ahí, su nombre: rawda= jardín. Consta de 64 tumbas hacia el sudeste como manda el rito islámico. De diferentes tamaños, sin restos puesto que el ultimo rey nazarí Muhammmad XII, Boabdil ( ) los manda exhumar y traslada su residencia a Mondujar, al conquistar granada los castellanos del norte.

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45 EL GENERALIFE El Generalife es una villa con jardines utilizada por los reyes musulmanes de Granada como lugar de descanso, situado en la ciudad de andaluza de Granada, España. Fue concebida como villa rural, donde los jardines se mezclaban con los huertos. El origen del nombre está discutido. Algunos abogan por Yannat al-Arif como Huerta del Arquitecto, aunque pudo significar El más excelso jardín. Ese huerto real era común en las cortes hispano-árabes. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Se construyó durante los siglos XII y XIV y fue transformado por Abu I-Walid Isma'il. Es de estilo árabe nazarí y está situado en el lado septentrional de la Alhambra. Está formado un conjunto de edificaciones, patios y jardines, que lo convierten en uno de los mayores atractivos de la ciudad de Granada, y, junto con la Alhambra, en uno de los conjuntos arquitectónicos más destacables de la arquitectura civil mulsulmana. El acceso se efectúa hoy día por los denominados Jardines Nuevos, fruto del saber hacer de Francisco Prieto Moreno, que a mediados del XX creó una concatenación de espacios abiertos formados por cipreses, que, por medio del arte topiario, figuran arquitecturas. Los espacios confinados reproducen modelos de patios de la Granada nazarí. La sabia combinación de los referentes históricos y la tradición granadina (suelos empedrados, el uso del agua, los exuberantes macizos florales...) hace de los Jardines Nuevos un lugar destacado, que muchos consideran ya inseparable de los palacios a los que anteceden. Últimamente gran parte de los jardines han sido destruidos para la construcción de un auditorio.

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49 El Patio de la Acequia. El primero -y más emblemático- de los patios es el llamado de la Acequia. Responde al esquema árabe de patio cuatripartito (Char-Bagh) de origen persa y de gran tradición en Andalucía, pero condicionado por la disposición eminentemente longitudinal obligada por el terreno y potenciada por la presencia de la Acequia Real, que llevaba el agua al resto de los huertos y posteriormente a la Alhambra. De esta manera, el otro brazo de la cruz queda tan sólo insinuado por una interrupción en la vegetación, y una fuente baja en el cruce de ambos. La acequia está cuajada con dos filas de surtidores que cruzan sus chorros de agua de forma espectacular, que fueron añadidos en el siglo XIX. No hay que olvidar, que aunque el Generalife es, al igual que la Alhambra, una construcción eminentemente musulmana, la influencia cultural cristiana de sus concepciones arquitectónicas siempre fue de gran importancia: con anterioridad a 1492, por el constante trato con los reinos vecinos y el aislamiento respecto al resto del Islam, y posteriormente, por el uso y adaptación de los espacios a las concepciones occidentales llevados a cabo por sus distintos dueños y habitantes. Otro ejemplo de lo anteriormente dicho es la apertura a lo largo del patio de un amplio mirador ya en época cristiana.

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51 Al fondo del patio, y tras un pórtico de cinco arcos, se accede a la Sala Regia, hermosamente decorada con yeserías, y que conduce a una mirador del siglo XIV. La decoración tanto de esta sala como del resto del conjunto es comparativamente más sobria que la de las salas de la Alhambra. Como villa rural de descanso, la ausencia de fasto debía de ser preponderante. Como dijo don Leopoldo Torres Balbás: "En el Generalife todo es sencillo e íntimo. No hay nada –arquitectura o naturaleza condicionada por la mano del hombre– que trate de asombrarnos con pretensiones de magnificencia o de monumentalidad." De la Sala Regia se accede, a través de unas escaleras, al Patio del Ciprés de la Sultana, protagonista de leyendas y misterios en la tradición granadina. El patio, muy modificado en época cristiana, conserva, sin embargo la influencia de sus antiguos habitantes, en lo que Chueca Goitia dio en llamar invariantes castizos, y el encanto romántico de sus surtidores y su frondosa vegetación.

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53 A continuación, y prosiguiendo el ascenso, llegaremos a los Jardines Altos del Palacio. Para ello pasaremos por la Escalera del Agua, ingenioso artificio al servicio del disfrute de los sentidos. El objetivo principal de dicha escalera era comunicar el palacio del Generalife con una pequeña capilla situada en lo alto de la colina. El acceso, en pendiente, representaba un problema que el alarife nazarí supo salvar con singular maestría: la escalera, interrumpida por varios descansillos de planta circular presididos por fuentes bajas, tiene como pasamanos dos canales hechos con humildes tejas y ladrillos y encalados. Por ellos discurre el agua de la Acequia Real, abrupta e irregularmente produciendo una sinfonía de tranquilidad y reposo, y humedeciendo el ambiente, todo bajo una cerrada bóveda de laureles. El espacio resultante, umbrío y fresco, servía a la vez para efectuar las abluciones previas a la oración, y de esa manera, se convertía en el sahn que toda mezquita requiere. La escalera es toda una lección arquitectónica de respuesta a un condicionante sabiendo hacer de necesidad virtud y con los materiales más pobres.

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