ALABANZA Y ADORACIÓN CONGREGACIONAL. Resumen taller anterior Adoración es relacionarse con Dios. Desde el principio Dios quiso tener una relación estrecha.

Presentación del tema: "ALABANZA Y ADORACIÓN CONGREGACIONAL. Resumen taller anterior Adoración es relacionarse con Dios. Desde el principio Dios quiso tener una relación estrecha."— Transcripción de la presentación:

1 ALABANZA Y ADORACIÓN CONGREGACIONAL

2 Resumen taller anterior Adoración es relacionarse con Dios. Desde el principio Dios quiso tener una relación estrecha con el hombre, lo que se vio cortado por el pecado. Cristo vino a restablecer esa relación. para Fuimos creados para adorar a Dios Dios busca adoradores, no busca adoración. Adorar en espíritu significa que amamos a Dios, que nuestros actos no son rituales vacíos sino que son fruto del amor que le tenemos

3 Resumen taller anterior Adorar en verdad significa que somos obedientes a la Palabra de Verdad y que buscamos la relación con el Padre a través de Jesucristo que es la Verdad. Jesucristo nos da la posibilidad de tener línea directa con el padre (libertad) Adorar es esforzarnos por agradar a Dios (sacrificio vivo), principalmente con nuestras acciones, pero también diciéndoselo directamente.

4 Qué es Alabanza La RAE define Alabanza como “Expresión o conjunto de expresiones con que se alaba” y Alabar es definido como “Elogiar, celebrar con palabras” En el hebreo se usa la palabra Halal, que significa “hacer brillar, presumir, celebrar, hacer mucho ruido y alarde, ser jubiloso”. Se encuentra por ejemplo en Salmos 22:22-23, 35:18, 56:4, 63:5, 69:30.

5 Qué es Alabanza Alabar no es cantar, pero podemos usar la música para alabar. La alabanza se expresa con palabras.

6 Por qué alabamos Es una ordenanza. Ver Efesios 5:18.20 Porque Él es Dios. Ver 1 Crónicas 29:10-11 Por las bendiciones que Él nos ha dado. Ver Salmo 103

7 Por qué alabamos Porque él es bueno y su amor (misericordia) es para siempre. Ver Salmo 136. La alabanza es guerra contra los enemigos espirituales de la iglesia. La alabanza engrandece a Dios y por lo tanto empequeñece a sus enemigos (Isaías 30:32). La alabanza reconoce que el que puede pelear la batalla por nosotros es Dios (2 Crónicas 20:20-24).

8 Alabanza personal La alabanza debe ser una constante en nuestra vida La Palabra dice que debemos alabar siempre a Dios. Ver Hebreos 13:15. Salmo 34:1 lo hace mas claro: “Alabaré al Señor en todo tiempo; a cada momento pronunciaré sus alabanzas”

9 Alabanza personal La alabanza no depende del estado de ánimo. Al encontrarnos tristes la alabanza nos ayuda a recordar lo que Dios ha hecho por nosotros y nos anima a confiar en Dios. Ver Salmo 42:5- 6 La alabanza debe ir acompañada de adoración personal, sino es sólo palabrería. Ver 1 Corintios 13:1.

10 Cómo debe ser la alabanza congregacional

11 Alabanza Congregacional La alabanza debe ser el primer elemento de nuestros cultos. Salmo 100:4 dice: “Entren por sus puertas con acción de gracias; vayan a sus atrios con alabanza” El propósito de la alabanza congregacional debe ser exaltar a Dios en el lugar donde se está realizando la reunión.

12 Alabanza Congregacional Salmo 100, nos dice que la alabanza debe ser alegre. La alabanza no es un escape a las tristezas de la vida. No podemos simplemente olvidarnos de lo malo de nuestra vida y alabar a Dios. Debemos dejar nuestras cargas a los pies de Dios y luego alabar confiando en su fidelidad.

13 Alabanza Congregacional La alabanza no puede hacerse en silencio. Implica al menos ocupar nuestra boca para decir algo. Salmo 22:22 dice “Anunciaré tu nombre a mis hermanos; entre tu pueblo reunido te alabaré”

14 Alabanza Congregacional La música nos ayuda a alabar a Dios. Ver Salmo 150. Sin embargo, la música no necesariamente es alabanza.

15 Alabanza Congregacional Formas de expresar alabanza: Alzando las manos (Salmo 134:2), Aplaudiendo (Salmo 47:1), Gritando (Levitico 9:24, Salmo 5:11) Danzando (Salmo 149:3). Respecto a la danza, debe ser algo espontáneo no forzado. Casi no hay casos en la biblia respecto a alabanza congregacional a través de la danza.

16 Importancia de la Alabanza Congregacional Formas de expresar alabanza: Alzando las manos (Salmo 134:2), Aplaudiendo (Salmo 47:1), Gritando (Levitico 9:24, Salmo 5:11) Danzando (Salmo 149:3). Respecto a la danza, debe ser algo espontáneo no forzado. Casi no hay casos en la biblia respecto a alabanza congregacional a través de la danza.

17 Importancia de la Alabanza Facilita la acción del Espíritu Santo. Dios está en todos lados. Dios está presente en mayor medida cuando hay personas reunidas en su nombre (por ejemplo nuestros cultos). “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ello” Mateo 18:20.

18 Importancia de la Alabanza Cuando su pueblo le alaba de corazón, se reconoce que Dios es la persona más importante en la reunión y nos disponemos a aceptar su voluntad. Por lo tanto Dios se mueve en medio de la alabanza. Ver Salmo 22:3

19 Alabanza y Adoración Congregacional

20 Alabanza y Adoración Adoración en el contexto congregacional significa expresar el amor que sentimos por Dios. Este amor viene de la relación que tenemos con él, es decir de la adoración personal.

21 Alabanza y Adoración No existe una ordenanza que diga que la Alabanza debe ir antes que la Adoración, pero en Salmos 95, el salmista recomienda llegar a la reunión el Alabanza y posteriormente invita a la congregación a postrarse en adoración.

22 Alabanza y Adoración Es difícil, espiritualmente hablando, adorar congregacionalmente a Dios, es decir expresarle amor a través de palabras, sin haber establecido anteriormente que Él es el merecedor de esas palabras de Amor, que es lo que hacemos al alabar a Dios. En general, le alabamos por lo que Él hace y le adoramos por lo que Él es.

23 Expresiones de adoración Alzar las manos “Alzad vuestras manos al santuario y bendecid al Señor” (Sal 134:2). Levantar las manos es una señal universal de redención o sumisión. Cuando las alzamos delante del Señor estamos reconociendo que nos sometemos completamente a Su voluntad. Arrodillarse. Salmo 95:6 dice “Vengan, adoremos e inclinémonos. Arrodillémonos delante del Señor, nuestro creador”