Nacido de mujer: La expiación y la encarnación

Presentación del tema: "Nacido de mujer: La expiación y la encarnación"— Transcripción de la presentación:

1 Nacido de mujer: La expiación y la encarnación
Resumen de la Guía de Estudio para la Escuela Sabática del 22 de noviembre del 2008. Visite:

2 Texto clave: 1 Juan 3: 5. “Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él”.

3 Estructura: Cuando Dios y la humanidad se reúnen.
El ministerio de Jesús. Cómo superar al enemigo.

4 ¿Cómo sucedió la encarnación?
¿Qué características tiene la encarnación de Cristo? ¿Por qué era necesario que Cristo no perdiese sus cualidades divinas? Colosenses 2: 9. “Porque todo lo que Dios es, se encuentra plenamente en la persona de Cristo”.

5 La encarnación de Cristo tiene tres características, a saber:
La Biblia menciona que el poder del Espíritu Santo cubrió a María y ella quedó encinta, de la misma manera que el poder del Espíritu Santo descendía sobre el Tabernáculo para morar con sus hijos. La encarnación de Cristo tiene tres características, a saber: Cristo se hizo verdaderamente hombre. Él no se refugió en un cuerpo humano, tomó la verdadera naturaleza de hombre. Cristo no perdió ninguno de sus atributos divinos. Si Jesús hubiera perdido sus atributos habría sido menos que Dios y esto no podría habernos dado salvación. Cristo asumió forma de siervo. La naturaleza humana de Cristo fue para servir a Dios y todo lo puso bajo la autoridad del Padre; sin embargo, por esto no significa que perdió sus atributos divinos. Existen dos razones por las cuales Dios se hizo hombre: Para demostrar que la plenitud de Dios puede morar en la humanidad. Para expiar al hombre era necesario el sacrificio de Dios, aquel que tiene el poder de dar vida.

6 ¿Cuál es el motivo por el cual Cristo debía ser hombre?
¿Por qué Dios tomó la iniciativa de hacerse hombre? ¿Qué es nueva humanidad? 1 Corintios 15: 45. ...“ “El primer hombre, Adán, fue materia con vida”; pero el último Adán es espíritu que da vida.” Gálatas 4: 4, 5. “Pero cuando se cumplió el tiempo, Dios envió a su Hijo, que nació de una mujer, sometido a la ley de Moisés, para dar libertad a los que estábamos bajo esa ley, para que Dios nos recibiera como a hijos”.

7 La Biblia demuestra que Cristo fue un hombre como todos, pues nació de una mujer, comía, crecía, aprendía e inclusive murió. El ser humano, cuando fue creado y su representante fue Adán, decidió someterse al pecado y esto hizo que el hombre se separase de Dios; sin embargo, Dios en su inmenso amor decidió reunir nuevamente al hombre con él y de manera más perfecta, por medio de la humanización de Cristo. La humanización de Cristo fue más profunda que la creación de Adán, pues Dios estuvo entre nosotros. Cristo es el segundo Adán, por orden cronológico, el cual representa a una nueva humanidad, que está más unida a Dios. El hecho que exista una nueva humanidad no significa que haya dejado de existir la anterior, vivimos juntos en un lugar donde existe la esperanza de volver a ser perfectos, a la imagen de Dios.

8 ¿Qué importancia tiene el bautismo de Jesús?
Mateo 3: 15, 17. “Jesús le contestó: Déjalo así por ahora, pues es conveniente que cumplamos todo lo que Dios ha ordenado... Se oyó entonces una voz del cielo, que decía: “Este es mi Hijo amado, a quien he elegido””.

9 Al solicitar el bautismo, Jesús se identificó con los pecadores:
Nos dio un ejemplo a seguir. Nos dio la posibilidad de unirnos a él por medio del bautismo y el ministerio de Juan. Después del bautismo, Jesús se puso a orar y su oración fue respondida. (Lucas 3: 21, 22). Jesús buscaba la aceptación de su Padre en su actuar. Dios estaba dando a conocer que Jesús era aceptado, pues en él había complacencia (cumplía las órdenes de Dios). La Deidad estaba involucrada en el bautismo. La Deidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) estuvieron siempre presentes en el plan de salvación. Cristo era aceptado, por ende, se abría un canal de amor de Dios a los hombres.

10 ¿Cuál fue el objetivo del ministerio de curación?
¿Qué abarcaba el ministerio de curación? ¿Qué métodos usó Jesús para curar al hombre? Mateo 9: 35: “Jesús recorría todos los pueblos y aldeas, enseñando en las sinagogas de cada lugar. Anunciaba la buena noticia del reino de Dios, y curaba toda clase de enfermedades y dolencias”. Marcos 2: 17. “Jesús los oyó, y les dijo: Los que están buenos y sanos no necesitan médico, sino los enfermos. Yo no he venido a llamar a los buenos, sino a los pecadores”.

11 Por medio del ministerio de curación, Cristo estaba venciendo al poder de la muerte y con él a Satanás. El ministerio de curación abarcaba la curación del hombre de manera física y espiritual. La nueva humanidad no hacía distinción de razas ni por la condición humana (leprosos, gentiles, etc.), todos debían vivir en paz. Cristo no sólo usó el poder para curar, por medio del cual lo seguían muchos, sino también el de las palabras, por medio ellas enseñaba la salvación: “Anda y no peques más”. Por medio de su carisma hacía que todos vivieran en compañerismo, compartiendo todo. Cristo vino a buscar a los pecadores no a los buenos.

12 Al enfrentar las tentaciones ¿qué venció Jesús?
¿Cuál es el beneficio de que Jesús haya vencido las tentaciones? ¿Por qué la muerte de Cristo nos da salvación? Marcos 1: 12, 13. “Después de esto, el Espíritu llevó a Jesús al desierto. Allí estuvo cuarenta días, viviendo entre las fieras y siendo puesto a prueba por Satanás; y los ángeles le servían”. 2 Corintios 5: 21. “Cristo no cometió pecado alguno; pero por causa nuestra, Dios lo trató como al pecado mismo, para así, por medio de Cristo, librarnos de culpa”. Al enfrentar las tentaciones ¿qué venció Jesús? ¿Cuál es el beneficio de que Jesús haya vencido las tentaciones? ¿Por qué la muerte de Cristo nos da salvación? Marcos 1: 12, 13. “Después de esto, el Espíritu llevó a Jesús al desierto. Allí estuvo cuarenta días, viviendo entre las fieras y siendo puesto a prueba por Satanás; y los ángeles le servían”. 2 Corintios 5: 21. “Cristo no cometió pecado alguno; pero por causa nuestra, Dios lo trató como al pecado mismo, para así, por medio de Cristo, librarnos de culpa”.

13 Cristo venció a toda tentación, estando incluso en condiciones desfavorables, esto pues Adán decidió pecar a pesar que tenía todas las facilidades del Edén. Hay cosas más importantes que las necesidades humanas, la fama y el poder. Jesús, con su actitud da victoria a todo ser humano que desea coger la fe en él. La nueva humanidad, liderada por Cristo, a diferencia de Adán, vive en completa sumisión a Dios, puesto que Adán se rebeló. Jesús nunca pecó y esto le da capacidad para demostrar que está por encima del poder satánico y por ende, su justicia es válida y destruyó el liderazgo de la rebelión del hombre haciendo justicia como cordero y asumir el pecado de todo el mundo.

14 Conclusiones El plan de salvación nació para crear una nueva humanidad en la que Cristo es el nuevo representante, pues venció aquello que Adán no pudo y en condiciones mucho más difíciles. Cristo se hizo humano para reconciliar al hombre con Dios, siendo divino para reconciliar a Dios con el hombre. Cristo oró para recibir la bendición de Dios y el Padre lo reconoció como su representante y permitió abrir las puertas del cielo. Las puertas del cielo están abiertas para todos mediante Cristo y de él sale el sol de justicia, el cual está disponible para todos los pecadores.

15 Conclusiones El requisito para entender las cosas divinas es nacer de lo alto y esto significa dos cosas: nacer de agua y del Espíritu Santo. (Juan 3: 3 – 8). Nacer del agua es mediante el bautismo. Nacer del Espíritu Santo es ser santo o Hijo de Dios (Lucas 1: 35). Sólo por medio de la encarnación se hizo posible la expiación. El misterio y el milagro de la encarnación siempre van juntos y se caracterizan por: La sabiduría infinita contempló la salvación por medio de la misericordia y justicia. El nuevo nacimiento implica una nueva oportunidad para vivir, siendo salvos. La posibilidad de vivir en armonía con Dios, por medio de Jesús. Ser transformado, de gloria en gloria, a la imagen de Dios. (Romanos 12: 2). Somos hijos de Dios en una nueva humanidad, somos hijos de Dios (1 Jn. 3: 1 – 3). Amar a los pecadores es un misterio para el ser humano.

16 Conclusiones El más grande misterio es el amor de Dios, el cual creo esta fórmula: Muerte de Uno = Vida para todos. El plan de salvación está en la vista de todo el universo, por el cual muchos ángeles y seres del universo observan y estudian el misterio del amor de Dios, el cual nunca terminará. Cuando Cristo nació, nació la luz de esperanza para el mundo y cuando Dios hace algo lo hace sin posibilidad a fracasar, lastimosamente el hombre es quien decide fracasar por decisión propia. Sigamos el ejemplo de Cristo, quien fue una luz siguiendo planes perfectos, los que sin embargo requirieron un plan de contingencia, el cual nos ayuda a tener todo bajo control.